Las escuelas rurales siempre han contado con una única herramienta para llevar a cabo su tarea, la cual es "El currículo", por lo que en cada lugar los docentes han tenido que darle forma y adaptarla para que su uso se alinee al contexto social. El currículo es una herramienta que se ha elaborado y pensado con un criterio y mentalidades de personas que su contexto social ha sido el urbano, por lo que el docente del área rural debe poner en práctica su creatividad para llevar a la acción dicho currículo.
El trabajo pedagógico se realiza en los diferentes ámbitos sociales, de modo que para el docente en las áreas rurales se presenta con muchos más desafíos por la cultura y deficiencias o escasez tanto de edificios, insumos, mobiliario, libro, entre otros. Se puede decir entonces que hasta hoy ha existido una incoherencia de cómo se ha construido el currículo, ya que este está adecuado a determinado grupo. Aunado a esto, hoy por hoy se tiene que sumar el impacto que ha dejado la pandemia en dichas áreas. Según el periódico el País, Latinoamérica ha sufrido la crisis educativa más grave de los últimos 100 años, literalmente dice: "en el 2019 antes de pandemia se vivía una crisis de aprendizaje el 53% de los niños que terminaban la escuela primaria en América Latina y el Caribe no podía leer ni entender un texto simple. Hoy, luego del cierre de las escuelas por el equivalente a casi dos años académicos, se estima que ese porcentaje ha aumentado al 64% en toda la región.''
A lo antes mencionado le tenemos que sumar algo que sigue afectando a la escuela rural, que son los ingresos que tienen los hogares en dichas zonas, que según la estadística del (INE):
- 75% es el porcentaje de analfabetismo en muchas de las áreas rurales de Guatemala.
- Dos tercios es la proporción de niños guatemaltecos que viven en la pobreza.
- US $4 dólares al día es el ingreso diario promedio de una familia guatemalteca en áreas rurales (quince a sesenta quetzales aproximadamente.)
- Nueve de cada diez es la proporción de escuelas en las zonas rurales de Guatemala que carecen de libros.
